Desde
la ventana del avión
pude
verte
y
aunque nunca me dijeron
a dónde iba
estaba
mas que contenta
sólo
con mirarte desde lejos.
Te
veías preciosa, e iluminada
como
diva rock star
entre
espejos y demonios…
allí estaba yo otra vez ,
en
la París de mis sueños
anhelaba
volver
así
fuese por un instante.
Y
creo que me caí del avión esta vez
pues,
caminé por tu Eiffel
probé
tu croissant
ví a Monet
de
hecho,
fui
mas allá….
porque
en uno de tus cafés
estaba
Morrison con Bolan y su guitarra
tarareando
get in on.
Al
despertar
con
ánimos renovados
busqué
la manera real
de
ir a verte
pero
me dijeron
que
para ello
debía
empeñar hasta mi blog
y
aun así no conseguiría llegar.
Ante
aquella cachetada de realidad,
faltándome
mas
de
lo que puedo pagar,
sintiéndome
orgullosamente
“pobresora”,
formadora
de futuros turistas
que
podrán visitarte,
alguien
lanzó
una
patética frase
“que
el mundo es de todos….
pero
no en porciones iguales”….
reduciendo
con su ignorancia
al
espíritu humano y al planeta
a una infame porción
de
vida,
de
espacio,
de oportunidades
porción
por demás muy básica.
Mas,
tú me conoces….
y
sabes que
con
“la porción de mundo”
que
me tocó
aunque
sea
pidiendo
cola (aventón, auto-stop)
alguna
vez nos encontraremos
mientras,
por los momentos…
¡À
Bientôt!